¿Qué es el Hygge?
El secreto danés de la felicidad
Últimamente se está hablando mucho del Hygge en internet y redes sociales. Sin embargo, no es nada nuevo, puesto que en Dinamarca es conocido desde hace dos siglos. Se dice que es uno de los secretos por los cuales este país europeo encabeza las listas de los países más felices del mundo. Tal vez el verdadero secreto resida en su prosperidad económica y en sus políticas sociales, pero hay que reconocer que, desde luego el Hygge, infeliz no puede hacerte.
¿Qué es el Hygge?
Cuando los daneses hablan de Hygge, se refieren a pequeños gestos cotidianos que te hacen feliz. Es un término muy amplio y que define muchas cosas: una actividad, una comida, una determinada decoración, la iluminación, la compañía o un establecimiento, por ejemplo. El Hygge tiene que ver con los planes relajantes y hogareños: una taza de café caliente en el sofá, con una chimenea, un jersey calentito y una buena compañía es un plan muy hygge. Sin embargo, aprovechar el atasco para contestar mails a través del móvil no sería nada hygge, todo lo contrario, sería muy uhyggelig.
¿Cómo hago mi vida más Hygge?
Una de las primeras cosas que has de hacer es sacar tiempo para disfrutar de ti mismo/a. Los planes hygge se pueden hacer solos sí, pero es importante pasar tiempo de calidad con nuestros familiares y amigos, abrirles las puertas de nuestra casa y hacerles participes de nuestra vida. Para ello es importante buscar actividades amenas y poco estresantes. Mejor una conversación tranquila entre dos o tres, que una reunión de quince personas con conversaciones cruzadas. Mejor música ambiental que una lista de grandes éxitos. Mejor juegos de mesa que videojuegos. Busca entornos que te sean cómodos y agradables, alejados del barullo y de las prisas de la ciudad. Una pequeña cafetería tranquila y bonita o un parque al atardecer pueden ser buenos lugares para pasar tiempo con algún amigo.
Un estilo de vida más hygge también influirá en la decoración de tu hogar. La luz natural por el día se irá sustituyendo por una luz más tenue y cálida al caer la noche. La luz del fuego de la chimenea es ideal, pero si no podemos contar con ella, la luz de unas velas también proporcionan un ambiente cálido y relajante. Muebles de madera clara, paredes blancas, plantas de interior, mantas y cojines son perfectos para hacer tu hogar un sitio más hygge.
Por último, es muy importante tener muy en cuenta el pasado y la familia. Los muebles heredados de abuelos y bisabuelos nos ayudarán a tenerlos presentes. Preparar platos de nuestra infancia, y enseñar a las nuevas generaciones juegos, actividades o comidas de cuando éramos pequeños es una actividad que enlaza a diferentes generaciones, que ayuda a detener el tiempo, y esto es, sin duda, algo muy hygge.